Mi viaje empezó el día que salí de la casa de mis padres y me fui calle arriba con la intención de descubrir el mundo. Pero enseguida saltaron las alarmas y me detuvieron al final de esa misma calle. Tenía tan solo dos años.

No llevo la cuenta de lIMG_8712os países que he visitado. En algunos solo he entrado de paso sin ver mucho, en otros solo he visitado dos o tres ciudades, y los demás, me he detenido más a conocerlos. Por ello carece de importancia que me cuelgue un número de países o que pegue banderitas en mi mochila.

Aunque me podéis ver visitando monumentos, lo que realmente me llama la atención son los diferentes puntos de vista, los lugares que no conocen los guías y las historias que aún faltan por contar.

Mi nombre es Rebe y tengo 34 años. Decidí salir de mi zona de confort y buscar nuevos desafíos. Algo que siempre siempre he llevado en la sangre. De pequeña ya viajaba por Europa con un camión. Así que viajo desde que apenas era consciente de ello. En 2016 me lancé a hacer algo más grande. Irme a visitar Sudamérica sin billete de vuelta. Con los ahorros justos. Y preparada para confiar en mí misma. Pero como es la vida de inesperada que, después de varios países por el sur, terminé en Canadá con la Working Holiday Visa. Y de ahí he seguido trabajando y viajando más. Llenando mi vida de experiencias y de historias que contar.

En 2020, plena pandemia de por medio, fui madre por primera vez de un niño con alma de vikingo. Desde entonces seguimos viajando los dos juntos.

Actualmente me encuentro llevando adelante un proyecto de publicación de libros.